martes, 14 de abril de 2015


Sesión número 19, del día lunes 13 de abril.

Se reinició el curso luego de vacaciones de Semana Santa, introduciendo el tema del Impresionismo.
Un aspecto que se consideró como importante en este subtema de inicio, fue el que se relaciona con la idea de que en el Impresionismo, no solo se le dio importancia a aspectos que han terminado por ser lugares comunes o de referencia obligada a la hora de hablar de esa vanguardia; a la sazón: que es la primera gran vanguardia de la modernidad en el Arte, que estaban muy interesados en hacer de la cocina de los colores, un abanico cromático que en gran medida dependía de la pintura al aire libre, en exteriores o lo que se dio en llamar, au plein aire, que habían decidido estar en contra del régimen establecido del arte institucional.
Dichos aspectos, sin duda, habríamos de considerarlos como aceptados. Pero en esta pequeña introducción se hizo énfasis en un aspecto que destaca entre los impresionistas de la época, se hizo un planteamiento en torno a la idea de que ellos también estaban en un determinado momento, indagando o inquiriendo en relación a una nueva forma de ver, o de trastocar un orden tradicional en la composición y su administración de espacios.
Para ese motivo, recurrimos a uno de los ejemplos clásicos en el tema; vimos y analizamos el Desayuno Sobre la Hierba, de Édouard Manet, de 1863. Veíamos que si podemos hacer una inversión de uno de sus personajes, podríamos imaginar que se trata de un sujeto muy similar al que aparece en La Creación del Hombre de Migue Ángel en la Capilla Sixtina. También hicimos un desglose de la composición de la obra con cierto detalle pormenorizado.


Posteriormente, seguimos hablando de algunas de las características del movimiento y pasamos a comentar la obra clásica de Pierre-Auguste Renoir, Au Le Moulin Galette, de 1876. Dicha obra nos permitió ver varios aspectos que tienen que ver con esa clase media emergente de la época, que invertía tiempo y dinero y placer en el dispendio en la vida cotidiana de la modernidad de aquella cultura europea, idílica, pero también muy real y contundente. Por tal motivo, se comentó a manera muy breve, sobre uno de los eventos trascendentes del París de aquella época; el proyecto de la Gran Comuna de París, como proyecto de autogestión y gobierno.
- - Al margen, se realizó un sorteo de diferentes autores impresionistas los cuales la próxima semana irán describiendo en un ejercicio de reseña y exposición.
    

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